viernes, 26 de abril de 2013

Adoración nocturna Gójar

ADORACIÓN NOCTURNA
Sábado 25 de marzo, Gójar, a las 19:15 h.



"Así pues, si quieres tener y encontrar pleno gozo y pleno consuelo en Dios, procura despojarte de todas las criaturas, de todo consuelo que tenga que ver con las criaturas, pues puedes tener la certeza de que, mientras te consuele o pueda consolarte la criatura, nunca encontrarás consuelo verdadero. Pero si no puede consolarte nada que no sea Dios, en verdad entonces te consolará Dios y, al mismo tiempo, te consolará con Él  y en Él todo lo que es gozo. Si te consuela lo que no es Dios, no tendrás consulo ni aquí ni en ninguna parte; en cambio, si no te consuela la criatura ni encuentras gusto en ella encontrarás consuelo en todas partes". (Maestro Eckhart, El libro del consuelo divino)






"La causa principal de la enfermedad que ha estallado en Europa es la supresión del problema religioso en el seno del hombre. El problema religioso coincide con el problema de la elección entre el bien y el mal, esa pareja de opuestos que el ser humano debe enfrentar desde siempre. Por medio del conocimiento y la experiencia, el hombre creyó  alcanzar la libertad de poder hacer el bien y el mal a  voluntad. Esa libertad es como una "brasa ardiente" en manos de un niño y ese niño procura librarse de ella. En el curso de los siglos utilizó, dos métodos:
          1º.- Uno es el método "irreligioso" que niega la oposición entre el bien y el mal; dicho método, que se funda en el principio de que "todo vale", le quita al hombre su "esencia misma" que es el "esfuerzo orientado" y lo precipita en el tedio: ese tedio que inundó Europa luego de la guerra de 1914.
         2º.-El otro es el método "idólatra", por tanto, religioso en el sentido de un culto exclusivo por una realidad social disfrazada de divinidad. Consiste en delimitar un recinto donde los dos contrarios, el bien y el mal, "no tienen derecho a entrar", y captura al ser humano (científico, artista, sacerdote, soldado) con la ilusión de que está exento de toda responsabilidad ética por fuera de ese tecinto que lo protege.

         Los dos métodos llevaron a Europa a  la perdición; el primero ocasionó su descomposición, y el segundo causó la destrucción totalitaria. Ambos son igualmente causa de locura, en el sentido médico del término.

Es la pérdida del alma, disuelta por el tedio, degradada por la idolatría. No obstante, felizmente el ídolo es perecedero. La ilusión del poder se desvanece. El folklore está lleno de historia de gigantes que escondieron su alma en un sitio secreto y custodiado por dragones, pero que la perdieron, porque en general el gigante comete "la imprudencia" de esconder su alma "en este mundo". "Para tener seguridad, hay que esconder el alma en otro lugar".
"La mística es el paso más allá de la esfera donde el bien y el mal se oponen, por la unión del alma con el bien absoluto".
Es una unión amorosa, real, luego de la cual el alma se torna "distinta para siempre". El alma debe dar su consentimiento a Dios para que esa transformación sea efectuada. ¿Qué es Dios? Es "lo infinitamente pequeño...el grano de mostaza, la perla del campo, la levadura en la masa, la sal en el alimento". Y en la vida de un pueblo así como en la vida de un alma, " se trata de poner eso infinitamente pequeño en el centro" Tal es la esencia de la búsqueda weiliana. (Gabriella Fiori, Simone Weil, ed.Adriana Hidalgo editora).






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