jueves, 22 de junio de 2023

Pura Castillo Bidaburu mujer del Jefe del Estado Niceto Alcalá Zamora y Torres II República

Pura Castillo Bidaburu - mujer de Niceto Alcalá Zamora y Torres


PURA CASTILLO BIDABURU

de Priego de Córdoba a la Jefatura del Estado


José Antonio Espejo Zamora


El 23 de enero de 1901, Pura Castillo contrajo matrimonio con Niceto Alcalá-Zamora y Torres. Aunque no eran parientes, compartían familiares, posición económica e ideología política. Ella cuatro años más joven que Niceto, nació el 2 de febrero de 1881, y se bautizó en la parroquia de Priego el 5; ambos se criaron en la calle del Río. Ella, moriría en Pau en 1939; él, en Buenos Aires, diez años más tarde.


Recorrer la vida de Pura es pisar las huellas de Niceto y descubrir en cada paso del Jefe del Estado el pensamiento de su mujer. El pensamiento del matrimonio Presidencial tuvo por objetivo la solución que Europa formulará tras la II Guerra Mundial: creación de Estados democráticos en cuyos parlamentos se encuentren expresadas todas las tendencias políticas, salvo que Niceto la formuló quince años antes, en el periodo de entreguerras, donde triunfaban los totalitarismos; ésta fue la audacia y acierto del Presidente; solución no compartida por los que, seducidos por la Alemania de Hitler, la Italia de Mussolini o la Rusia de Stalin, lucharon por lo contrario. La lucidez de Niceto surgió no sólo de su formación intelectual sino también de su capacidad reflexiva, así como de su experiencia en política internacional, que le llevará a participar en Copenhague en la Conferencia de Desarme tras la I Guerra Mundial y se extenderá más allá de su experiencia en España cuando Charles de Gaulle, como consejero, lo convoque tras la II Guerra Mundial. Ninguna relevancia lúcida habría tenido ni Pura Castillo ni su marido, Niceto, si, como apunta Unamuno, no hubiesen sido “paisanos, hombres del país, del pago, de la patria que en el paisaje se revela y simboliza… Y sin ser aldeano, paisano, no cabe llegar a ciudadano.” Todo lo que fue la familia Presidencial se gestó en Priego de Córdoba; Pura se hunde en sus raíces para ser; desde su bautismo es marcada por su origen; así queda expresado a través de los nombres con los que es nombrada: María Purificación Narcisa Enriqueta Jesús de la Columna. Tanto la prensa como los estudiosos han remarcado la religiosidad de Pura; y esto no es más que la expresión del equilibrio y aceptación de la propia realidad, de lo que se es, pues, como indica el filósofo Julián Marías, ser europeo es ser hijo de tres experiencias conjugadas y expresadas a través del cristianismo, la experiencia del pueblo judío y su relación con Dios; del mundo griego, búsqueda de la verdad desde la razón; del pueblo romano y el Derecho Romano. Estas tres experiencias vividas como un cristiano consciente nos hacen ser hijos de la tierra, Priego - Europa; hijos del pasado para ser alguien con futuro; esto lo expresa la filósofa Simone Weil en su libro Echar raíces: una persona “tiene una raíz en virtud de su participación real, activa y natural en la existencia de una colectividad que conserva vivos ciertos tesoros del pasado y ciertos presentimientos de futuroConstituye el único órgano de conservación de los tesoros espirituales juntados por los muertos, el único órgano de transmisión mediante el cual los muertos pueden hablar a los vivos. Y la única cosa terrena que tiene una relación directa con el destino eterno del hombre es la irradiación –transmitida de generación en generación- de aquellos que tuvieron plena conciencia de tal destino”.


Pura Castillo Bidaburu - mujer de Niceto Alcalá Zamora y Torres


Breve genealogía de Pura Castillo Bidaburu:


Pura fue hija de Enrique Castillo Aguilar y de Natalia Bidaburu Cámara; ambos, naturales de Priego de Córdoba. Enrique nació en 1852; fue hijo de Antonio Castillo Torreblanca Castillo y de Fermina Aguilar Tallón; fue su madrina su tía carnal Adelaida Castillo, mujer de Narciso Arjona; ambos serían más tarde los padrinos de bautismo de Pura Castillo; estos serían padres de Adelaida Arjona Castillo, que, casada con José Valera, crearían la fundación Arjona-Valera; Narciso fue hijo de Juan de Dios Arjona Chica y de Purificación López Alcalá-Zamora. Francisca Castillo, otra tía de Enrique Castillo Aguilar, contrajo matrimonio con Juan Alcalá-Zamora Caracuel, tío carnal de don Niceto. Fermina Aguilar Tallón, abuela paterna de Pura, aunque había nacido en Algarinejo, su abuelo, el arquitecto Francisco Aguilar García Berruguilla, se crió en Priego, de donde eran todos sus antepasados, al menos desde el siglo XVII. El arquitecto fue hijo de José Aguilar y de Rosalía García Berruguilla; ésta hija y nieta de arquitectos; su tío Juan García Berruguilla decidiría, como arquitecto, que la construcción del Ayuntamiento de Salamanca y cerramiento de la Plaza Mayor lo realizara García Quiñones; el primo hermano de Rosalía García Berruguilla, Facundo Caballero García Berruguilla, fue ministro de Hacienda, director de La Gaceta y ministro de fomento durante la primera mitad del s. XIX; su hija Margarita sería la Condesa de Oñate; un hermano de Margarita, Antonio, sería embajador de España en Londres y Juan, otro hermano, discípulo de Goya. El notario de Priego, Patricio Aguilar Cano, primo de la condesa de Oñate, domiciliado en la casa que linda con la de don Niceto, fue tío abuelo de doña Pura; la hija de éste, Cristina, se casaría con el hijo de otro notario de Priego, Áureo García de Castro Najarro. Otra prima del suegro de don Niceto fue Dolores Aguilar García Penche, mujer de Miguel Valverde López, tío del escritor prieguense Carlos Valverde López. Un primo de Enrique Castillo Aguilar, Francisco García Aguilar, se instaló en Málaga donde abrió una farmacia. Sus hijos: Manuel García Guerrero, farmacéutico, fundaría el Colegio de de Farmacéuticos de Málaga; Francisco, médico, fundaría el Colegio de Médicos de Málaga; José fue diputado y alcalde de Málaga; Luis, abogado, concejal de Málaga, (su hijo, Luis García Valls, yerno del arquitecto Fernando Guerrero Strachan); Leopoldo, militar; Adolfo, murió en Madrid y sería la propia Pura Castillo quien colocara la esquela en el periódico Ahora junto a la de su madre, Natalia Bidaburu, el 9 de julio de 1935.  Natalia fue hija del músico y liberal vasco León Bidaburu, natural de Vergara y de la prieguense Juliana Cámara García Calabrés; para la genealogía de Juliana me remito a los estudios realizados por Manuel Peláez del Rosal. De sus antepasados heredaría principios éticos, la fe católica y su posición progresista en el mundo político y social. Enrique Castillo Aguilar tuvo varios familiares en la masonería: Rafael Gordillo Aguilar en la logia de Alcalá la Real; el marido de Encarnación Gordillo Aguilar, Rafael Valverde García, grado 32 de la de Algarinejo; éste, además, fundó el Comité Liberal en Priego; era sobrino nieto del farmacéutico de Loja, José Ezequiel Ruiz Matas, fundador de la comunidad espiritista de Loja y padre del médico jefe de la logia de Alcalá Real.



Vida pública de Pura Castillo Bidaburu


Mercedes Valverde Candil presentará a Pura como una mujer culta que hablaba perfectamente francés, así como buena pianista y conocedora del mundo del derecho; no es para menos, pues ella fue hija, mujer, prima y sobrina de abogados. La prensa se hará eco de las mujeres que rodean a don Niceto:mujeres fuertes en la adversidad, mujeres a las que no les asustaba la popularidad… ¡Cuánto debe la República a aquella noble enlutada, un poco encorvada por el peso de los años, que, madre de la esposa, más lo parecía de él mismo; a la dama ejemplar, compañera inseparable del prisionero, y a las mujercitas alegres y decidoras, que comprendían la necesidad del sacrificio y alentaban a todos con un sano optimismo! Eran entonces valientes y decididas. En todas partes las primeras. Se habían sumado a la cruzada revolucionaria y estaban dispuestas a llegar hasta el final. -¿No les asusta a ustedes verse mezcladas en todas estas andanzas revolucionarias? -¿Por qué? ¿No se ha entregado a ellas nuestro padre? Allá donde vaya cualquiera de nosotros estaremos siempre todos…”. En otras declaraciones, dirá Pura que para ella lo primero es el hogar y después la política. La vida pública de Pura Castillo no comenzó con la Presidencia de la República; así, la encontramos en 1910 acompañando a los Infantes Carlos de Borbón y Luisa de Orleans a La Carolina para visitar los campos de batalla de Las Navas y de Bailen; en 1917,  junto al Conde de Romanones, asiste a la comida en el Palacio de Oriente para celebrar la onomástica de la reina Victoria; o en su actividad en la Cruz Roja. Durante la República y como mujer del Presidente, su actividad se verá acentuada; quisiera resaltar sólo tres actos: el primero, su visita al Lyceum Club Femenino, institución dirigida por María de Maeztu, Victoria Kent, Zenobia Camprubí, entre otras. El segundo se refiere a la construcción de una manzana de casas para familias desfavorecidas de Priego; y por último, el más significativo desde el punto de vista histórico, su participación como mujer en las elecciones en las que por primera vez, ella y todas, podían hacer uso de su derecho al voto; derecho por el que luchó Clara Campoamor con el apoyo de don Niceto y la oposición de muchos. 


Actas Capitulares del Ayuntamiento de Priego de Córdoba -1611-
Hidalguía apellido Aguilar

En otras ocasiones, encontramos a Pura trabajando por su cuenta; así lo narra Niceto, que es avisado por ella de que el día de las elecciones podía ser objeto de un atentado; ella había sido informada por uno de sus contactos; es curioso que entre los interventores electorales en la mesa donde les correspondía votar a los Alcalá Zamora en Madrid se encontraba un ciudadano cubano, Patricio Aguilar González, profesor, nieto del notario de Priego del mismo nombre y como se ha indicado, tío abuelo de Pura; Aguilar González se incorporará más tarde a las filas de Galarza. A la mujer de Niceto la encontramos actuando como la mano silenciosa que llega allí donde no alcanza el Presidente; Azaña, en sus Diarios, refiere que doña Pura lloraba junto al obispo de Madrid a causa de la ley de Congregaciones: “4 de junio (1933) …Los obispos han publicado un documento condenando la ley de Congregaciones, y se habla de otro del Papa. Cuentan que estas cosas han sembrado la desolación y el espanto en la familia de don Niceto. Refieren una escena de lágrimas entre el obispo de Madrid y la mujer del Presidente… estos disgustos domésticos no dejan de influir en la política, cosa no prevista por la Constitución.”


Pura Castillo - II República


José Serrano Ramos, íntimo amigo de don Niceto, le comentará a la prensa como Pura Castillo “ha sido siempre la compañera ideal de un hombre cómo él: Yo sé bien que la mujer del presidente ha influido decididamente en su vida con su talento, con su bondad, con su prudencia. Él la ha consultado siempre; lo mismo para el cuidado de su hacienda que para resolver los problemas más arduos de su vida política.” En otro momento, el mismo José Serrano dirá: “doña Pura es un dechado de energía, de aliento, de resistencia. Obra de su espíritu, que en ella es algo extraordinario… Ella había nacido en la misma calle, y hasta en la misma acera que él… don Niceto, en el 35; en el 33, su coetáneo, mi interlocutor; y doña Pura, en el 13 ó el 15”.


El Heraldo de Madrid recogerá la reacción de Pura al enterarse de la noticia de un golpe de estado en Chile: “¡Si no es posible! ¡Si los tiempos no están para dictaduras! Nada más inseguro que un régimen asentado sobre la violencia.” En esto también llevaba razón doña Pura; ella, madre de 7 hijos, tendrá que sufrir los avatares de un país en guerra civil. Si en 1921 enterró a su hija Elia de 5 años, en 1938 sintió la muerte de su hijo Pepe en Valencia mientras que el resto de la familia Presidencial se encontraba exiliada en Francia; más tarde, su hijo Luis será conducido a un campo de refugiados republicanos españoles en Francia. Antes, durante el mes de julio del 36, ya comenzará a ser perseguida la familia, tanto por el gobierno republicano como por los aspirantes al mando; en ese mes, entrará la familia en la ciudad de París en el furgón de equipaje, pues el vagón donde venían comenzó a arder; su casa de Madrid fue asaltada por el gobierno de Giral, así como las cajas de seguridad del banco con permiso de Largo y Galarza. En Priego y pueblos aledaños, según Queipo de Llano, se desencadenó una persecución contra parientes y amigos de la familia presidencial; así, el 21 de septiembre del 36 sería fusilado en Algarinejo un primo de Pura, José Aguilar Aguilera, sin que tuviese la más mínima implicación política; ni un mes más tarde otra prima de Pura, Cristina Aguilar González, nieta del notario de Priego, Patricio Aguilar, inspectora de educación en Cuba, murió en un extraño accidente de coche. La marginación social de la familia no concluyó con el final de la Guerra Civil sino que se prolongó más allá de la constitución de 1978: recordemos el discreto funeral de don Niceto y doña Pura en el cementerio madrileño de la Almudena por expreso deseo del gobierno del demócrata Suarez, o cómo el capellán de dicho campo santo se negó a ir a rezar a la tumba del Presidente o cómo en el 2022 el párroco del Sagrario de la Catedral de Granada, Juan Gutiérrez, se negó a celebrar una misa por Pura y por Niceto cuando cada año preside un funeral por el último dictador de España. Sin embargo, la Iglesia no ha tenido reparo alguno en aceptar la Fundación Valera Arjona; tampoco la construcción por parte de las hijas de Niceto de la iglesia de la Trinidad en Priego; o la Fundación Aguirre en Antequera, colegio de los Salesianos, constituida con el patrimonio de otro primo de Pura, Rafael García Aguilar, y su mujer Salvadora Muñoz González. Pocas familias habrán sido más generosas con sus pueblos y sus gentes; eso sí, con el patrimonio personal y no con los bienes públicos.













domingo, 18 de junio de 2023

Peregrinación Hermandades Virgen de las Nieves Dílar - Las Gabias

Ermita Virgen de las Nieves Dílar (6:00 horas)


PEREGRINACIÓN VIRGEN DE LAS NIEVES

DE DÍLAR A LAS GABIAS

(Ahora mismo)

Ermita Dílar 
Parroquia de Dílar  (7:00 horas)

Parroquia Gójar (8:00 horas)

Gójar camino de Otura





Monumento Dílar a la Virgen de las Nieves


Gójar

Gójar

Gójar

Gójar


Gójar


martes, 13 de junio de 2023

sagrado corazón Gójar 2023


Sagrado Corazón - Gójar 

misa viernes 16 de junio a las 20:00 horas


Ha llegado la noche. El padre y todos los hijos vienen a casa. Los mayores del trabajo, los pequeños de la escuela. Alguno a lo mejor está enfermo en casa.

-Vienen del camino y al anochecer se sientan a la mesa a cenar. Aquella mesa es el punto de llegada de las sendas de su vida. 

-El padre ha pasado a la cabecera de la mesa. Junto a él se sienta el hijo mayor, que es el que más le ayuda. Al otro lado el más pequeño.

-Todos están sentados alrededor de la mesa. Hay un mismo amor que les une. En este amor todos se sienten hijos y por eso se sienten hermanos.

-El padre parte el pan. Antes cuentan lo que les ha pasado a todos y el padre, como siempre, cuenta la historia de su amor. Después parte el pan que se ha sacado de su cuerpo.

-Con la fuerza del amor, que les entregó en el pan, los hijos, que lo reciben, pueden compartir todo. Todo lo que son, todo lo que valen, todo lo que tienen. Empezando por los más pequeños.

-Y unidos en amor, pueden empezar de nuevo el camino. Desde la mesa volverán otra vez a las sendas de su vida, para llevar adelante la familia y la casa.

-Quieren reunirse un día todos juntos. Ya libres y hermanos. Ya construida la casa. Todos en comunión. Con la alegría del amor. Podría ser una cena para siempre.

Este misterio tenemos que cantarlo y explicarlo en la mesa del Señor… Al lado de la mesa está el crucificado, con los brazos extendidos en la cruz. Abarcan a toda la humanidad, a toda la tierra, a toda la historia. El cirio pascual ardiendo nos da a entender que el Crucificado vive. Que el Padre lo resucitó de  entre los muertos y lo sentó a su derecha y a la cabeza de su familia y de su hogar. El hermano que hace sus veces nos da un saludo lleno de alegría. <<La gracia de nuestro Señor Jesucristo, el amor del Padre y la comunión del Espíritu Santo esté con todos vosotros>>.


Vamos a detenernos un momento a contemplar este misterio de amor que nos envuelve. Somos una gran familia en un inmenso hogar. Venimos desde un camino largo, hasta esta mesa.

-Preside el Padre de Jesús, que es nuestro Padre. A su derecha está su Hijo amado, el Hijo mayor, el Primogénito. Él nos ha dado el abrazo de amor, que el Padre le dio a él, el Espíritu Santo. Y en este abrazo de amor nos hemos reunido todos.

-Jesús, el Primogénito, es la cabeza de muchos hermanos y cabeza de la casa común. Por eso, en su amor, hemos llegado a ser todos hijos en Él y hermanos en Él. Tiradas todas las barreras. Y nos sentimos herederos de la casa común, responsables con él para llevarla adelante.

-El centro de esta inmensa reunión de familia es la mesa que Jesús pone. Parece que son sus mismas manos. En ellas entrega el pan y la copa. Se entrega él mismo a sí mismo con todo su amor. Su cuerpo entregado y su sangre derramada.



-En la mesa todos son iguales. Todos somos hijos y hermanos en Él.  Pero al mismo tiempo cada uno es distinto. Pues cada hermano ha recibido un don de su amor para un servicio. Todos así reunirán la familia y prepararán el hogar. Compartiendo todo lo que son, lo que tienen, y lo que valen.

-Pero habrá que levantarse de la mesa para hacerse al camino. Al vernos reunidos, echamos de menos a otros muchos hermanos. Faltan la mayoría. Faltan los más pequeños. Están dispersos por el mundo. Y la casa está por hacer. Está mal construida. No parece un hogar. Esta misma mesa nos alienta a construirla de nuevo como mesa grande, donde se sienten todos y los últimos sean los primeros en servir. Por eso Jesús, se levantará de la mesa y nos dirá: <<id>>.

-Este es el misterio de la Iglesia del Señor, <<prefigurada desde el origen del mundo, preparada admirablemente en la historia del pueblo de Israel y. En el antiguo testamento, constituida en los últimos tiempos, manifestada por la efusión del Espíritu Santo, que se perfeccionará gloriosamente al fin de los tiempos>>. (LG2).

¿Cómo es que hoy nos asombramos de su misterio? Es muy sencillo. La humanidad ha terminado una de las etapas más atrevidas de su historia. Y se encuentra en la noche. El Señor, que ama tanto a su humanidad y a su creación, camina delante para abrir una senda nueva hacia la casa del Padre. Por eso ha encendido la claridad de su rostro en el rostro de la  Iglesia, para poder así iluminar a todos los hombres y a todas la criaturas, que esperan ardientemente su liberación y reconciliación.

Así hace el Señor las cosas. Un buen día a un pobrecillo papa, Juan XXIII, que hacía las veces de Pedro, se lo dijo al oído: Reúne a los hermanos en el cenáculo. Llámalos al cenáculo. Pídeles que se sienten a mi mesa. Sobre ella les partiré el pan de mi palabra y de mi cuerpo. Ya verás cómo sus corazones se encienden de fuego y de esperanza. Es hora de salir.

El pobrecillo papa Juan llamó a todos los hermanos al cenáculo. Y allí permanecieron unidos escuchando la palabra y partiendo el pan. Abrieron las manos para acoger el fuego y compartirlo. Y luego salieron por todas las sendas de la tierra a darnos la buena noticia de pentecostés. Arde el fuero. Sopla el viento. El Señor va a la cabeza reuniendo a su familia y preparando su hogar. Es hora de salir. Y así se ha prendido fuego por la tierra. No sé si ha llegado a tus ojos. Pero no dejes de abrir la pueta de tu comunidad y de tu corazón. Nosotros solo queremos darte esta buena noticia: <<Jesús es el Señor>>. (Marcelino  Legido, Luz de los pueblos, ed. Sígueme).


Andalucía o las Hespérides

 (fragmentos - Marguerite Yourcenar



"…En la punta extrema de España como en los confines de Asia Menor y Tracia, Europa se confirma al mismo tiempo que se acaba. Este Oriente, ese Occidente oscilan desde hace veinte siglos en los dos platillos de una balanza cuyo astil es Roma. Aquí, como en el archipiélago helénico, los imperios se han hecho y deshecho a merced de las tempestades y de las contingencias de los abordajes: España tiene su Trafalgar como el Levante Actium o Lepanto. En Granada, lo mismo que en Constantinopla, encontramos la adelantada punta del mundo de la tienda y del desierto instalado en el seno de los jardines de Europa. Cádiz, Ultima Gades, sirvió al mundo grecorromano de pórtico sobre el Atlántico, al igual que el antiguo Bizancio sobre el mar Negro y Asia. Y el aire leve y seco de Sevilla, su ritmo de existencia a un tiempo continental y marítimo, recuerdan irresistiblemente a Atenas…

…La España romana duró alrededor de siete siglos, que constituyen con mucho el periodo más largo de paz que haya conocido la Península. En todas partes, en el mapa y en el suelo de la Andalucía actual, afloran las ciudades, las carreteras, los acueductos, los puertos, los monumentos de la España tranquila, superpoblada, próspera, que suministraba a Roma su cuero, su carne salada, su esparto y los lingotes de sus minas…; el puente de Córdoba fue utilizado por las legiones de Galba. Ronda, rodeada de montañas, conserva la huella de Pompeyo… Itálica, patria de Trajano, de Adriano, de Teodosio, se halla sepultada bajo la tierra en más de sus tres cuartas partes… 


Los historiadores han tratado de definir lo que fue aquella infiltración del clan español en Roma, fenómeno que más tarde se repetirá en la época de los Borgias…; se ha creído ver un españolismo latente en la exageración de un Séneca o un Lucano, o en el nihilismo ascético de Marco Aurelio… No olvidemos, sin embargo, que ese individualismo estoico, esa fogosidad barroca, esa tendencia imperial de dominación universal no aparecerán otra vez en la Península hasta mil años después de la caída de Roma… el baile que recuerda las flexiones y torsiones de las hijas de Gades, gozo de los libertinos de Roma; cocina con sus fritos y salazones, con sus ensaladas y su predominio de lentejas y habas, al igual que un menú de Marcial o de Horacio; el Circo y sus juegos sangrientos; la profunda religio agrupada en torno a unos lugares consagrados y a unas estatuas sacrosantas…, más importante aún que todo esto, el mismo ordenamiento de la casa: el atrium, el patio, ese patio en donde siempre murmura una fuente.

Tras la paz romana, la prosperidad árabe; también ésta duró  alrededor de siete siglos… la pérdida de Granada sucede con cuarenta años de diferencia a la conquista de Constantinopla. 

…Andalucía se funde en ese ardiente concierto de la España cristiana y únicamente le añade unas cuantas y conmovedoras variaciones místicas o carnales. En casi todas, el tema es la búsqueda: esas figuras de historia y de leyenda se definen por esa palabra <<quiero>>, que significa a la vez amar y buscar. Juana la Loca sigue por los caminos a un  ataúd, incubando a su muerto; Juan de la Cruz, asomado a la ventana frente al sublime espectáculo de Sierra Nevada y de la vega de Granada, aparta de su espíritu esas formas visibles a medias a la luz de las estrellas para buscar a Dios en la noche; Miguel de Mañara va de mujer en mujer por las calles del barrio de Santa Cruz, antes de acabar su vida con un hábito de servidor de los pobres, olvidando, sin duda, la triste voz de Elvira; más cerda de nosotros la insaciable Belisa y la implacable Bernarda… Tierra  de poetas que ayer todavía bañaba con su sangre García Lorca. Tierra de poetas, sobre todo por haber sido perpetuamente amada y recreada desde la distancia, en los suspiros de los poetas árabes que lloraban su Granada perdida, y también en la obra de los poetas occidentales de más allá de los montes de ultramar… 

Y empezamos a comprender lo que nos conmueve de ese país, y que a veces nos sobrecoge: el contacto directo con la realidad, el peso bruto del objeto, la emoción o la sensación fuerte y simple, antigua y siempre nueva, dura y dulce… no hay país más sojuzgado que éste, pero tampoco más libre, con esa rudimentaria y suprema libertad hecha de desprendimientos, de pobreza, de indiferencia, de amor a la vida y de desprecio a la muerte. Enumeramos nuestros deleites: Granada era hermosa, pero aquel ruiseñor que cantaba todas las noches… Cádiz…; aquella vieja monja medio ciega que nos mostraba sin verlos los cuadros del Hospital de la Caridad ocupa un lugar en nuestro recuerdos junto a la figuras pintadas…” (Marguerite Yourcenar, Ensayos, traductora: Emma Calatayud, ed. Penguin Random Hause Grupo editorial, 2017.)



Benedicto XVI:

…En síntesis, podemos decir que toda la historia de Jesús, tal como la relata el Nuevo Testamento, desde el relato de las tentaciones hasta la aparición en Emaús, muestra que el tiempo de Jesús… no es un tiempo de transformación cósmica en el que ya se se han tomado las decisiones definitivas entre Dios y el hombre, sino un tiempo de libertad. En él Dios sale al encuentro de los hombres a través del amor crucificado de Jesucristo para reunirlos en una libre aceptación del reino de Dios. Es un tiempo de libertad, que también significa un tiempo en el que el mal todavía tiene poder. El poder de Dios en todo este tiempo es también un poder de paciencia y de amor, contra el que sigue activo el poder del mal. Es el tiempo de la paciencia de Dios, que a nosotros nos parece exageradamente excesiva, un tiempo de victoria, pero también de las derrotas del amor y de la verdad.



Al ponerse en camino con Jesús como los discípulos de Emaús, la Iglesia aprende a leer con él el Antiguo Testamento y a comprenderlo así de manera nueva. Aprende a reconocer que eso fue precisamente lo que se predijo sobre el <<Mesías>> y, en el diálogo con los judíos, debe tratar continuamente de demostrar que todo esto tiene lugar <<según las Escrituras>>. Por eso, la teología espiritual ha subrayado una y otra vez que el tiempo de la Iglesia no significa, por ejemplo, haber desembarcado en el paraíso, sino que se corresponde para el mundo entero con los cuarenta años del éxodo de Israel. Es el camino de los liberados. Del mismo modo que a Israel se le recuerdas siempre en el desierto que su errancia es consecuencia de la liberación de la esclavitud de Egipto, y al igual que Israel anhelaba constantemente en el camino volver a Egipto, sin ser capaz de reconocer  el bien de la libertad como un bien, el cristianismo se comporta del mismo modo en su camino de éxodo: reconocer el misterio de la liberación y de la libertad como un don de redención les resulta siempre difícil a los seres humanos, que prefieren renunciar a su liberación. Con las misericordias de Dios, sin embargo también pueden comprender constantemente que la libertad es el gran don para una vida verdadera…



…en mi opinión, aún perdura la percepción de que seguimos necesitando la gracia y el perdón. Para mí, es un <<signo de los tiempos>> el que la idea de la misericordia de Dios sea cada vez más central y dominante, empezando por sor Faustina, cuyas visiones reflejan profundamente, de distintas maneras, la imagen de Dios propia del hombre de hoy y su anhelo de la bondad divina. El papa Juan Pablo II estaba  profundamente imbuido de este impulso, aunque no siempre se manifestara de forma explícita. Pero es indudable que no se trata de una casualidad el que su último libro, que vio la luz justo antes de su muerte, hablara de la misericordia de Dios. Partiendo de las experiencias en las que pudo constatar desde su más tierna infancia toda la crueldad de los seres humanos, afirma que la misericordia es, en última instancia la única auténtica reacción posible contra el poder del mal, y la única eficaz. Solo donde hay misericordia termina la crueldad, termina el mal y la violencia… En mi opinión, esto pone de relieve que, bajo el barniz de la seguridad en sí mismo y en la propia justicia, el hombre de hoy oculta un profundo conocimiento de sus heridas y de su indignidad frente a Dios. Se  halla a la espera de la misericordia…



Fiestas Divina Pastora:

-Bajada el sábado 19  de agosto a las 20:30 horas.

-Misa Mayor de las fiestas el domingo 27 de agosto a las 12:30 horas.

-Procesión el domingo 27 de agosto a las 20:30.

-Misa en la Plaza, con confirmaciones y subida de la Divina Pastora a su camarín el sábado 9 de septiembre a las 20:00 horas.



Acerca de la vida después de la muerte

 (del psiquiatra: C.G. Jung, Recuerdos, sueños, pensamientos, ed. Seix Barral, vigesimoquinta impresión, 2019)


“Lo que voy a explicarle a ustedes del más allá y sobre la vida después de la muerte, todo son recuerdos. Son imágenes e ideas que yo he vivido y que me han inquietado. En cierto aspecto forman la base de mis obras, pues éstas en el fondo no son sino renovados intentos de dar respuesta a la interdependencia entre <<este mundo>> y <<el otro mundo>>. …actualmente los hombres casi siempre se identifican exclusivamente con su consciencia y se imaginan ser únicamente lo que de sí mismos saben. Todo el que tenga una idea de psicología puede darse cuenta de lo restringido que es este saber. Racionalismo y doctrinarismo son las enfermedades de nuestra época; ellas pretenden saberlo todo. Pero se descubrirán muchas cosas que hoy definimos como imposibles a causa de nuestro limitado punto de vista. Nuestros conceptos de espacio y tiempo tienen una validez sólo aproximativa y dejan abierto un amplio campo de discordancias y absolutas… 

Lo inconsciente nos ofrece una posibilidad al transmitirnos algo o aportarnos datos significativos. Afortunadamente es capaz de comunicarnos cosas que nosotros no podemos saber por lógica alguna. ¡Piensen ustedes en los  fenómenos sincrónicos, en los sueños premonitorios y en los presentimientos!



Una vez regresaba de Bollingen a casa. Era en la época de la segunda guerra mundial. Llevaba un libro conmigo,  pero no podía leer, pues en el instante en que el tren se puso en movimiento se me presentó la imagen de una persona ahogándose. Era el recuerdo de una desgracia ocurrida durante el servicio militar. En todo el viaje no pude librarme de esta imagen. Esto me inquietó y pensé: ¿Qué ha sucedido?  ¿Ha sucedido alguna desgracia? En Erlenbach me apeé y fui hacia casa preocupado todavía por este recuerdo. En el jardín correteaban los niños de mi segunda hija… todos me miraron con extrañeza y yo pregunté: <<¿Qué ha pasado?>> Me contaron que Adrian había caído al agua en el embarcadero y como no sabía nadar, por poco se ahoga. El hermano mayor le había salvado. Esto tuvo lugar exactamente en el momento en que yo en el tren fui invadido por mis recuerdos. Así, pues, mi inconsciente me había dado una advertencia. ¿Por qué, pues, no pude también darme información sobre otras cosas?



Algo parecido experimenté ante un caso de defunción de un familiar de mi mujer. Entonces soñé que la cama de mi mujer era una profunda fosa con muros tapiados. Era una tumba y recordaba algo antiguo. Entonces oí un profundo suspiro, como cuando alguien expira. Una figura que se parecía a mi mujer se incorporó en la tumba y surcó los aires. Llevaba una túnica blanca en que había bordados extraños signos negros. Me desperté, desperté a mi mujer y miré la hora. Eran las tres de la mañana. El sueño había sido tan extraño que pensé inmediatamente en que pudiera anunciar una defunción. ¡A las siete llegó la noticia de que una prima de mi mujer había muerto a las tres de la mañana! 


Cuando se tiene experiencias de este tipo se toma un cierto respeto por las posibilidades y aptitudes del inconsciente. Sin embargo hay que ser siempre crítico y saber que tales <<comunicaciones>> pueden tener siempre un sentido subjetivo… existen indicaciones de que por lo menos una parte de la psique no se encuentra sometida a las leyes del espacio y del tiempo. La prueba científica acerca de ello la aportaron los conocido experimentos de Rhine. Junto a incontables casos de presentimientos espontáneos, las percepciones fuera del espacio y otros casos de este tipo, de las cueles ya les he contado algunos ejemplos de mi vida, demuestran que la psique en ocasiones funciona más allá de la ley de la causalidad espacio-tiempo…Una imagen del mundo perfecta debería, por así decirlo, ser ampliada con otra dimensión; sólo entonces podría aclararse unitariamente la totalidad de los fenómenos… 



No fueron sólo mis propios sueños, sino también a veces los de otros, los que me formaron en la creencia sobre una vida posterior a la muerte, me la hicieron revisar o me la confirmaron…




Otra experiencia sobre la evolución del alma después de la muerte la tuve cuando -aproximadamente un año después de la muerte de mi esposa- me desperté de pronto una noche y supe que había estado en su casa, al sur de Francia, en la Provenza y había pasado todo el día con ella. Ella realizaba allí estudios sobre el Santo Grial. Esto me pareció significativo, pues ella había muerto sin haber terminado el trabajo sobre este tema.

La explicación a nivel subjetivo -mi ánima no había terminado todavía el trabajo emprendido por ella- no me dice nada, Peus sé que aún no lo he terminado; en cambio, la idea de que mi mujer después de muerta trabajaba todavía en su ulterior evolución espiritual, lo que siempre es dable imaginar, me pareció razonable, y por ello el sueño fue algo tranquilizador para mí…

Nuestra época ha insistido a toda costa en desplazar al hombre terrenal y ha contribuido a endemoniar al hombre. El fenómeno de los dictadores y toda la miseria que ha causado es debido a que se ha despojado al hombre de su tendencia al más allá por la estrechez de miras de los <<omnisapientes>>. De este modo se ha sacrificado también al inconsciente. La tarea del hombre debería consistir precisamente en lo contrario, en llegar a adquirir consciencia de lo que le impulsa desde lo inconsciente, en lugar de permanecer inconsciente o idéntico a ello. En ambos casos crearía consciencia desleal a su destino. En lo que no es posible alcanzar, el único sentido de la existencia humana consiste en encender una luz en las tinieblas del mero ser”.

 

Historia de un otoño

(fragmentos; José Jiménez Lozano, ed destino)


“…en este monasterio, la paz interior no se perdía, ni el aire se cargaba por visitas de arzobispos, cardenales, reyes, príncipes o inquisidores. Esas visitas y esas inquisiciones formaban ya parte casi de la vida diaria, desde hacía cincuenta años.

Monseñor de Noailles bajó la mirada, que había sostenido la de la priora, y prosiguió:

-Es preciso que firméis, Madre Du Mesnil. Ni siquiera se os pide que aceptéis en vuestra conciencia lo que dice el Formulario: que las cinco herejías condenadas por Roma están en el libro de Jansenio sobre San Agustín.

-¡Ojalá pudiéramos firmar Monseñor! Pero, ¿cómo mentir firmando? Si las cinco proposiciones heréticas condenadas por Roma no están en el libro de Jansenio, ¿cómo firmar solemnemente, con nuestra rúbrica en el Formulario, lo contrario?

-Roma dice que sí están, Madre Du Mesnil.

-Pero ¿están o no están, Eminencia? -preguntó la priora…

…Cuando hemos llegado a esta casa, cantabais, durante la misa, el símbolo de la fe: <<Et unam, sanctam, catholicam et apostolicam Ecclesiam>>. Ésta es la Iglesia que os pide que firméis, Madre Du Mesnil.

-¿Y cómo engañar a la Iglesia, Monseñor, cómo engañar al Santo Padre de Roma, haciéndole creer que aceptamos lo que no aceptamos: que esas cinco herejías están en Jansenio? ¿Cómo echar esa sospecha, más pesada que una lápida de oprobio, sobre las cenizas del santo obispo de Yprés? …Somos hijas sumisas de la Iglesia, Eminencia, y estamos en sus manos, pero sobre cuestiones de hecho no hay autoridad, y para nosotros es un hecho que las cinco herejías no están en Jansenio…

-Pero la obediencia mata el yo -dijo el arzobispo-. La obediencia <<perinde ac cadaver>> hace que los hijos de la Iglesia se tornen tan pasivos como un cadáver en manos de la autoridad de esa Iglesia

¿Y para qué quiere la Iglesia cadáveres, Monseñor? -preguntó la priora, volviendo sus manos a las mangas del hábito, después de alisar la roja cruz del mismo-. Me horrorizáis Eminencia. Nuestro Dios es un Dios de vivos, no de muertos; y apenas el Creador acabó de formar este pobre muñeco de barro que somos, le dio en la frente el soplo de su libertad para que fuese un hombre y no un muñeco. Siempre me han indignado las marionetas desde que era pequeña, Eminencia. Mi padre jamás nos permitió a sus hijas jugar con muñecos por miedo de que después, si tuviésemos hijos nosotras mismas o fuésemos constituidas en autoridad, manejásemos como a muñecos -como cadáveres que dicen esos señores de la Compañía- a los seres humanos que nos fuesen encomendados…

…Nadie tiene poder, si no puede resistir… Ese es el poder de Dios, Padre Vivant: estar abofeteado, escupido, azotado, crucificado… y RESISTIR, decir NO. Resistir ante todas las potencias del mundo y del infierno, desde la cruz y la humillación, antes que renegar la propia conciencia. ¡Y esas monjas pueden! ¡Un puñado de mujeres, algunas de ellas todavía unas niñas!”

(el rey de Francia venció, el Papa lo consintió; el convento fue destruido, las monjas dispersadas; hoy se pueden visitar sus ruinas a las afueras de París; a continuación sigue la novela con un diálogo entre la madre du Mesnil y el cura de un pueblo).

“-Yo no soy ningún teólogo, Madre Du Mesnil… soy un pobre cura de parroquia. Mis ovejas no buscan la santidad, Madre Du Mesnil, sólo escapar de pura misericordia de las llamas del infierno. Y eso, porque tienen miedo. No porque amen a Dios, ni siquiera deseen ir al cielo. Desean ir a Versalles… ¿Qué esperáis en los monasterios, hijas? ¿Qué creéis que es la Iglesia? Os parecéis a esas señoritingas que educáis: se pasan el día hablando de amor y creen que es una batalla de rosas o de poesía. En todo caso, de inacabables desmayos del corazón. Pero, en seguida, se encuentran embarazadas, se cubren de pecas, se hinchan. Su marido bebe o lee o anda tras otras muchachitas. Y los críos que llegan ahuyentan a Venus. En este despertar de la ilusión consiste el amor cristiano, que no es el enamoramiento, hija. Los poetas se enamoran de diosas, pero todo el Olimpo es mentira y Venus debía de ser una pelandusca bien hecha pero nada más. No, desde luego, la diosa del amor… me gustaría conocer al poeta que cantase a Venus embarazada.

Pues eso es lo que os pasa a vosotras y a los señores teólogos con la Iglesia. Estáis enamoradas de la Iglesia… Y, claro, la Iglesia no es una señoritinga, una Venus. En cuanto comenzáis a ver sus arrugas o su vientre hinchado os sentís desilusionadas… 

¿Aunque os pida firmar el formulario? …me resultaría más fácil que nunca firmar. Bien sabéis que no debo hacerlo.

…La Iglesia necesita oposición, necesita que una parte de sus hijos diga que no a ciertas cosas. El ideal de una Iglesia no es el de ser una balsa de aceite como un Estado. La obediencia de la cruz nada tiene que ver con la de este mundo…”